En la ribera del río Miño se encuentran las Pozas de Outariz, que tienen la ventaja de encontrarse a pocos kilómetros de la capital de Ourense. Es un espacio muy completo, ya que cuenta con bancos, fuentes, duchas de agua fría y caliente y, por supuesto, ¡las pozas! Su temperatura es de 60º C y sus propiedades son muy buenas para personas que sufren de reuma y artritis.
Los romanos ya conocían los beneficios de las aguas termales de A Chavasqueira, manantial que se sitúa en el margen derecho del río Miño.
Muy cerca de A Chavasqueira, encontramos el manantial termal de O Tinteiro. Durante muchos años ha sido uno de los manantiales de la provincia de Ourense más concurridos. Y no es para menos, ya que las propiedades curativas que se le atribuían a sus aguas, de mineralización débil, le ha proporcionado una fama casi internacional. Fluyen a una temperatura de 45º C y son muy beneficiosas para afecciones cutáneas, como dermatitis atópica y seborreica, así como problemas de acné. Otra de sus ventajas es que ayuda a cicatrizar heridas.
Al otro lado del río, encontramos la fuente de Reza, una fuente cuyas aguas sulfuradas salen a más de 30º C. Algunos estudios demuestran que sus propiedades son beneficiosas para procesos catarrales y enfermedades de la piel, como psoriasis, eccemas y acné.
No podemos olvidar las famosas Burgas, que son manantiales de aguas termales que oscilan entre los 64º y 68º C ubicadas en pleno centro de la ciudad de Ourense, una localización única. Lo más sorprendente es que arroja un caudal de hasta 300 litros por minuto.
Terminamos nuestro recorrido por las aguas termales con la Burga do Muiño, que tal y como su nombre indica, se encuentra a orillas del río, en la localidad de A Veiga. Se encuentra muy cerca del Tinteiro, a tan solo 3 kilómetros. Se trata de una gran piscina termal, cuyas aguas salen a una temperatura de 70º C de media y con un caudal de 20 litros por segundo. Además hay otras tres pozas secundarias.